Abstract
Esta investigación tiene como objetivo analizar los espacios compartidos, una práctica innovadora en Educación Infantil relacionada con la integración del movimiento en los contenidos académicos, así como su influencia en el aprendizaje y en la cantidad de actividad física desarrollada por el alumnado. En el estudio participaron 25 estudiantes (15 niños y 10 niñas) de 5 años de un centro educativo de la provincia de Málaga. La investigación adopta una perspectiva analítico-descriptiva, utilizando el estudio de caso junto con otros métodos de recogida y análisis de la información. Los resultados evidencian la necesidad e importancia de implementar metodologías activas como los espacios compartidos que incrementen la cantidad de actividad física del alumnado, así como los beneficios que aporta al desarrollo físico, cognitivo, social y a los procesos de enseñanza-aprendizaje, que se vuelven más activos y significativos.