Abstract
En el siglo XXI se observa en el espacio transatlántico una creciente producción de relatos que borronean las fronteras entre ficción y no ficción, que he propuesto denominar “relatos transfronterizos”, puesto que transforman la línea de demarcación entre estos dos tipos de relato en un territorio narrativo. Dentro de esta categoría, el llamado “relato de investigación” conoce un éxito particular tanto ante el gran público como ante la crítica especializada. En este artículo examinamos las diferentes formas en que el “yo-narrador-investigador” se articula al relato de la investigación, y los efectos de lectura que provoca cada modalidad.