Abstract
El conocimiento de las plantas y sus usos ha formado parte de la cultura tradicional de las poblaciones rurales. En el Campo de Cartagena, esta relación de las personas con el medio natural se manifiesta de manera privilegiada a través de los huertos familiares. Las condiciones geográficas e históricas de la comarca determinaron una cultura y un patrimonio etnobotánico de gran valor que está en riesgo de desaparecer. En las últimas décadas, el huerto familiar ha dejado de ser el huerto del pobre vinculado a la producción de alimentos para convertirse en un espacio que conecta fundamentalmente con el ocio. Este nuevo sentido del huerto se da en un contexto de intenso desarrollo de la agroindustria comarcal y de homogeneización cultural promovida por la globalización, el ciberespacio y la nueva cibercultura del aprendizaje que ha desplazado a los sistemas tradicionales de transmisión del conocimiento. Las consecuencias son una pérdida de la cultura etnobotánica local y de la biodiversidad de los huertos. Ante la imperiosa necesidad de proteger este patrimonio, repasamos las iniciativas en marcha y, centrándonos en los nuevos modelos de transmisión cultural, nos preguntamos por estrategias que redefinan la actual cibercultura homogeneizadora por otras que favorezcan la salvaguarda y revalorización de este patrimonio cultural.
Publisher
AIBR - Asociacion de Antropologos Iberoamericanos en Red