Abstract
La existencia de una relación directa entre las emociones de las personas y las habilidades sociales es irrefutable; además de ello, se debe tomar en consideración la importancia que tiene interiorizar ambas cosas desde las primeras edades. El siguiente estudio presenta un proyecto a través del cual se trabaja la Inteligencia emocional en un aula del segundo ciclo de Educación Infantil. Este proyecto ha sido diseñado teniendo en cuenta las cuatro fases esenciales de la metodología por proyectos, y consta de diez sesiones que contienen catorce actividades, distribuidas en un período de tiempo de dos semanas. Se trabaja a través de una metodología basada en un aprendizaje significativo, funcional y constructivista, con una perspectiva globalizadora, siendo el niño el protagonista de su propio aprendizaje, teniendo un papel primordial el trabajo cooperativo y el juego. También se intenta fomentar la cooperación familia-escuela, implicando a los familiares de los alumnos en su aprendizaje.