Abstract
El artículo analiza diferentes textos de extranjeros, mayoritariamente estadounidenses –pero no solamente–, que en su mayoría visitan el país y que podríamos considerar como literatura de viaje, entre 1885 y 1930, con el objetivo de evaluar la narrativa generada en cuanto a los paisajes étnicos que se forjan al interior de la geografía estatal y nacional costarricense en la cual se imponía históricamente la ficción de una homogeneidad y blancura. En el estudio podemos descubrir cómo los autores foráneos ejecutan ese ejercicio de cartografía étnico-racial y, muy especialmente, en torno al itinerario del desplazamiento del ferrocarril entre Limón – el puerto del Caribe– y San José –la capital, en el Valle central del país–. El flujo que se producía en el marco de la ruta ferroviaria permitía a los autores dibujar etnopaisajes o paisajes étnicos y, por ende, fronteras identitarias: un etnopaisaje homogéneo y estable –una supuesta homogeneidad cultural, lingüística y fenotípica– en el Valle Central y otro etnopaisaje más fluido y menos estable conformado por diversos grupos étnicos, pero especialmente de cuerpos afrocaribeños.
Publisher
Universidad Industrial de Santander