Abstract
Los materiales que están en contacto con el sistema corporal requieren de la característica primordial que les permita su aceptación e integración en el organismo: la biocompatibilidad. De igual manera, deben exhibir excelentes propiedades mecánicas, tribológicas y topográficas para que su prestación del servicio en el tejido especificado sea el más óptimo, pudiendo esbozar estas características mediante la caracterización de estos materiales a través de técnicas espectroscópicas y microscópicas. En el presente trabajo, una válvula artificial para el corazón fabricada en titanio y recubierta con diamond-like carbon (DLC), material altamente biocompatible, fue sometida a análisis XPS, FTIR y morfológico. En estos se encontró una alta interdifusión del recubrimiento con el sustrato junto con una gran señal de enlaces sp3 . Los enlaces terminales CH3 suponen una película poco compacta. La rugosidad del recubrimiento fue baja y adecuada para fines hemocompatibles.